Carta (la verdad de las cosas)

Lo que son las cosas... Me dedicaba a descansar, dormir, después de un día tan arduo lleno de batallas internas era lo que necesitaba, la mente positiva, el cuerpo que sostiene aquel escudo, aquel corazón con cicatrices entre abiertas necesitaba una pausa de la guerra, pero he aquí de nuevo contándole al Habitante como una tajada de filosa hoja de último minuto, antes de que muera un día más, me ha dejado solamente con aquello que muere al último. Fe.

Me han cortado la mente, me han arrancado el brazo y con él, aquel escudo aguantador que se llama corazón, ha caído al suelo y palpita con trabajo, esperando no dejar de latir para poder recobrarse y aguantar un día más. Pero la verdad de las cosas, aquel crudo titan que cae certero y sin piedad, me ha golpeado, realidad. He recibido una herida de muerte antes de que la luna sea veladora de mis sueños... o mis pesadillas, y a duras penas aguantaría un día más. 

Hago una pausa a mi escritura. Las palabras se revuelven en donde sea que en mi existan y no alcanzo una para poder continuar. Y así mismo, cuando la vea, no podre articular palabra alguna, no podre aguantar ante siquiera un rayo de sol que con tenue calor creo que podrá derrotarme finalmente sin mucho esfuerzo siquiera. Si, aquella persona es letal,  y en mi confusión casi eterna aún queda la pregunta ¿es realmente amigo... o enemigo? 

Tengo amigos, puedo jactarme de ello, aquellas personas que sin deberla ni temerla sacan la casta y me levantan casi knockeado. Pero ESA persona, que hice mi igual, que confié ciegamente en ella, que le confié mi vida una y mil veces, irónicamente es aquella que hoy me tiene a un paso de la derrota. ¿Qué paso? ¿en qué momento vino aquel golpe? No tengo idea, pierdo noción del tiempo y de mi espacio, siento que me riego en un campo inmenso y que nunca alcanzaría la paciencia para armarme pieza por pieza. Pues así, la mente positiva esta a nada de capitular, no puede más en este aspecto. y el corazón simplemente le falta vida para seguir latiendo. 

Que importante se vuelve una persona cuando le das el poder de serlo. no puedo negar que soy persona de buena FE y que gracias a ella y a algún pasado remoto lleno de sueños donde eramos 2 y solamente 1 al final unidos, aquella persona, hoy, autora material de mi flaqueza, fue alguna vez autora intelectual de mis sueños y autora material de mis deseos mas instintivos. 

Hoy me siento muñeco de trapo tirado a la basura, dejado en un callejón y mojándose con cada gota que el cielo llora. Siento que me han olvidado finalmente, que no ha valido cada batalla de la cual salí airoso para demostrar que puedo con todo inclusive consigo misma, con su inseguridad, con su crueldad sea consciente o inconsciente, con sus fantasmas, que puedo con el destino si es que existe, con el mismo Dios del que igualmente me reservo mis definiciones.

Me sentí Hércules, me sentí un rayo partiendo lo indivisible. Me sentí poderoso y con brío con tan solo tener esa musa que me inspiraba, hoy ángel de muerte y desdicha. 

Y de nuevo, pausa. No falta respiro a mi vida, solamente que me tiemblan las manos. ¿Será entonces que sí existe un destino? ¿Qué hay algo/alguien todo poderoso que dicto un destino separado desconocido y no uno unido? Dudo de mi propia fuerza ahora, de mi libre albedrío. De empuñar aquella extensión de mi llamada decisión propia. Dudo ahora de aquello que estaba seguro. Destino, Dios. Vida y muerte. Decisión y capacidad de lograr lo que quieres. ESA persona. ESA que importa más por historia y experiencia, por vivencias y sugerencia. Elección del alma e inteligencia casi instintiva. Por méritos que valen más que mil calamidades juntas. Siempre con la fe que hay entre nosotros. ESA persona, entre tantas tinieblas ya no la veo. 

Y al final de este día, me llevo aquello que muere al último, FE. Dejando aquí lo poco que sobra de mi sangre, de mi alma y mi vida. Esperando que mañana el primer haz de luz no me haga desfallecer. Esperando que esa mente positiva se recobre y guarde cordura. Que sea más sabía y sepa elegir a final de cuentas. Que aquel titan ahora juegue a favor de aquellos que merecen por vida propia, ser favorecidos. Mañana es otro día. Esperando que aquello que suponía más fuerte que todo, te golpee con tal fuerza que constituye propia y alcance... alcance para vivir nuevamente. Si no, espero que ese titan llamado realidad, me ayude a pasar tan pesada hoja de loza y me ayude a escribir una nueva historia con este pseudo-escritor recobrado y con ganas de volver a amar y creer en aquello que lo constituía fuerte, principios valores morales pasión y ejemplo poco ortodoxo para aquellos grises que ya no creen, como hoy estoy a punto de convertirme. ¡LO SIENTO, PERO YO NO MUERO!

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