martes, 27 de diciembre de 2011

De otras cosas (cuento)


Sentado, como me he acostumbrado a tomar café y fumar, observaba el va y ven de la gente, como cuando de chico te sentabas en la acera y veías los carros pasar. Uno crece e inclusive hasta se siente viejo, la mirada ya no tolera tanta rapidez de los autos y se conforma con ver a la gente caminar mas serena. Tarde fría pero con un sol brillante, de esos que te ciegan tanto como aquella que podría pasar frente a ti, pero que no se queda para regalarte un cálido abrazo, en fin, sol de invierno. Para eso tengo mi café.

Todas mis historias las cuento de aquí, desde diferentes ángulos. En la soledad de un mundo imaginario me abstraigo de aquellos que me rodean. Pronto, cuando termine, volveré con ellos. No puedo siquiera concentrarme cuando hablan, ha cambiado mucho y el hecho de recoger aquellas palabras sembradas al aire y poder seguir escribiendo se convierte en una dura tarea. Es mejor así. No es nada fuera de lo común que de pronto una oveja se separe del rebaño de vez en cuando. Irónicas mis palabras, pero solo se que no somos ovejas. 

A final de cuentas todos lo entienden y todos están bien con eso. Miro apenas por arriba de mi taza a la nada mientras el cigarro se consume celoso de que no lo "fumo", casi casi el humo me grita que lo voltee a ver. OK, una de cal y otra de arena. Mis 2 amantes en tiempos de introspección, de esos que te buscan cada que te les antojas, te aman y te dejan nuevamente libre queriendo más. Alterno los vicios y me regocijo en ellos. Relación co-depediente y adictiva. Estoy bien con eso.

El viento que podría decirse una brisa fresca peca en exceso de su cometido y trae a las nubes a codearse con los rayos del sol. Espectáculo de luces y sombras. El mismo "Moisés" no lo hubiera hecho mejor que hoy. Tan solo añadirle vida a lo que ya pasaba por mi mente desde tiempo atrás. Es un día extraño aún. Tan solo anuncia la caída de la noche. Y yo describiendo simplemente la vida sin adentrarme a mi mismo. Deflexión se llama.

Entre amores viciosos y y leves molestias mentales no me advierto. Si he de lidiar sera cuando y donde yo quiera. Finito. Y es que a veces no se que es mejor, a veces no se nada de nada y solo me se ahí con lo que veo y se. Fuck! Pero a estas penas uno se aferra a lo tangible y visible. A la seguridad que le da inclusive las cosas más simples. Por algo se habrá de empezar. Y si me aparte un poco de aquel bullicio para yacer solitario en un rincón fue para respirar y no asfixiarme.

Pequeños párrafos para tomar breves respiro por igual. Será hora ya de llevarme aquel café y el tabaco para que convivan con los demás y dejen de hacer preguntas incomodas a solas, al final se consumen solos y sin embargo persisten, saco otro cigarro o me sirvo más café y no los dejo.







martes, 20 de diciembre de 2011

Esa mala amante (antes del día "D")


Me despierto cada mañana con esa mal amante en mi cama, abro apenas los ojos y por instantes me olvido que duermo acompañado porque a veces se para y se va y otras de la nada aparece. Me olvido que es de aquellas fieles que siempre me acompaña y me sorprende verla de pronto a mi lado. Tan fiel que solo a mi mandato responde. Y esa mañana que me desperté, me estaba mirando maliciosamente. No son amores que quisiera pero por ti me vienen acompañando, te culpo pero por este día olvido. Por inercia ahora duermo menos, fumo más y los nervios no me aguantan. La angustia y la intranquilidad se apoderaron de mi hace ya algún tiempo. Esa mala amante no me deja ir.

Eres la prueba más difícil que he transitado, pero al final vale cada uno de estos días si los valoras igual que yo. Mi silencio no ahoga sus besos furtivos, no deja de robarme la atención, me enamora a las malas. Miro a mí alrededor y las vidas que observo me regresan una sonrisa. Me alegro mucho por ellos, nadie más que ellos para disfrutar después de tantas penas que han pasado, son el resto de mi vida. Y mientras tanto yo peno tu estancia indecisa. Peno la incertidumbre y libro una feroz batalla día a día con mis pensamientos, con lo que veo y con lo que siento. Tu palabra contra la realidad de lo que ha pasado. Mi corazón vive lastimado de muerte y solo tu podrías curarlo, pero no decides cuando.

No me mal entiendas. Te amo y día a día te lo grito desesperado. Pero te han acorazado de una manera casi inquebrantable. Pienso en todas las posibilidades antes de buscarte, tratar de comunicarme o siquiera pensar en ti. La incertidumbre, esa que me has dejado para sustituir tus besos, es celosa. Desgraciadamente tus acciones nos han llevado a este punto y me siento como Atlas sosteniendo nuestro mundo. Cada día siento que desfallezco y a veces me dejo ir por ese cansancio esperando a que finalmente me aplaste. Pero no. Al momento de abrir nuevamente los ojos esta ahí nuevamente a mi lado fumando un cigarro, después de haberme hecho el amor esa incertidumbre con varios nombres, como satisfecha después de un orgasmo. Finjo dormir y despreciarla levemente. Me volteo como ensimismado en ella y a veces respiro bocanadas de vida por tus destellos de aquello que anhelamos que me dan fuerzas, las suficientes para respirar algo maltrecho. Pero suficientes para que prontamente llegue un día donde nos sentemos los 3 sobre la mesa y nos acompañen aquellos que han evitado tantas alegrías. Los que no entienden porque no has sabido actuar sin evadir sus ataques cuando nos tratan de lastimar. Todos reunidos, ella callada y esperando a ver como reacciono. Sabe cuando me controla pero si ve que actuamos le da miedo y solo observa. Espera con la vista hacia abajo, esperando a ser reprendida. Sabe que si rompemos esa barrera, no se despedirá y cuando voltee a su asiento ya no estará. Así es de sencilla y pesada esta situación que hoy me aflige.

La angustia es esa mal amante que compartimos. O que aún con temor a no equivocarme, me has encargado. Mi cuerpo explota, de verdad es una experiencia cruel esta que vivo, no sobrevivo. Y hoy, en contra de todo, será el día donde la jale del brazo y la siente contigo y ella junto a mi lado. Donde tendrá que ver que tú estas ahí conmigo y no hay espacio para que la incertidumbre coquetee conmigo. Solo tú y yo y las promesas, palabras y sentimientos que después de pasar por un camino de espinas quedan. Y aquellos que duramente han juzgado nuestro lazo se enfrentaran a la solidez que nos queda, (pienso y siento) suficiente para que al final no quede nadie más que tu y yo. Si lo quieres es tan sencillo, si lo dudas, nunca podría pasar. Estamos los 2 y al final, vivimos o morimos los 2. Vivir contigo prefiero.

Pero mientras tanto los minutos son minutos, segundos, segundos. Pero pasan tan lento uno a uno burlándose. Estoy muy cansado como para no hacerles caso. Estoy muy angustiado como para no sentirme ya desesperado. Pero estoy, aún estoy aquí y soy necio con la vida, con la realidad que me ha madreado a su gusto. Peleo por mi y por demostrar que esto tiene un porque. Que tú estas hecha para mi y que solo tu puedes arrancarme de tus brazos.

Mientras, la angustia se apodera de mi, sobretodo en las mañanas que sabe que lejos estas, así como aquellos lobos que se han querido acercar a ti mientras no me miran. No es lo mismo, la angustia no la ves siempre, sabes que existe pero no preocupas porque me quede con ella. Así de claro te he dejado mi corazón. Así he aguantado este camino. Y hoy te toca arrebatarme para caminar nuevamente contigo a los ojos del mundo. No quiero más de esto, no quiero seguir siendo embelesado por esta pseudo forma de amores que me toma, no quiero seguir siendo señalado por aquellos que apuntan sin verme en realidad, aún sabiendo donde estoy. Quiero todo de ti y nada de nadie.

Después de las ironías, lujurias y tonterías de la vida, se apuesta todo lo que somos en esta partida. No hay marcha atrás, no vuelvo y aquí dejo todo. No aguanto un día más con la pareja que me has encargado. La incertidumbre se va hoy. Y tú te quedas conmigo si tus palabras son ciertas y tu corazón esta dispuesto a que así sean. Todo o nada.

No gastare más esfuerzo es los besos que me quitan las 2. No tengo más fuerza para sufrir, ni para vivir así. Tengo fuerza para ti, siempre y cuando no me dejes desfallecer y cada día que me levante te vea a mi lado y nunca te vayas. Mientras me hables al oído y me enamores con la verdad. No con palabras aprendidas para descansar la conciencia. Solo así me quedo. Solo así soy tuyo. Mientras me regales la tranquilidad que mi corazón busca soy todo de ti.

Hoy que enfrentemos al mundo, no me sueltes, no te vayas y no dudes. Confía en lo que te digo y que de frente pongo la vida. Confía que nadie apuesta tanto por miedo a perder todo y yo por ti doy tanto que no tengo miedo a perder si tu estas a mi lado. Si apuestas conmigo no pierdes, porque me tienes a tu lado y no dejare que sufras siquiera un ápice por esto. Si me demuestras que aquel camino de espinas que ha lacerado fuertemente mi corazón ha quedado atrás y que hoy es el 1er día del resto de nuestras vidas, todo queda en el olvido.

Solo de ti pido que defiendas eso que sentimos y que nadie se atreva a dudarlo siquiera. Solo te pido a ti. Y esa mala amante que alguna vez dejaste en tu lugar, la incertidumbre que en este momento me acompaña y lastima mis entrañas se ira para nunca volver. Esta es mi última apuesta porque todo estoy dejando en la mesa, Si somos los habitantes, nadie puede volver a nuestra morada, si tu eres para mi, hoy lo defenderemos. Carmen Jones no nos podemos fallar. 

El habitante de tu sangre


De vez en cuando hay un amor
que es mas claro que el sol...
y que fácil que puede ver
el camino del corazón...

(Enrique Bunbury - Llevame - El Licenciado Cantinas)

jueves, 8 de diciembre de 2011

Carta a Carmen


Carmen:

Esa silueta pequeña que solo limita tu cuerpo pero no aquello tan bello que eres, a veces me es difícil de abrazar por completo, eres aquello que me llena en todos los aspectos, buenos y malos. Sí, así eres tú, a veces me lastimas y a veces me sigues enamorando y a veces nada, solo tu ahí. Pero siempre he querido estar a tu lado. Aquello que antes me parecía una posibilidad, la volvimos una realidad, casi una regla, una máxima. Nunca me di cuenta, no tanto por tu tamaño, sino por ti, de cuando te anidaste tan hondo en mi pecho, traspasando las barreras físicas y emocionales embelesando la cordura necia de un corazón con varias cicatrices... pero lo hiciste y llegaste tan fácil como un cuchillo incandescente en pan y ya no me dejaste.

Hoy, nos enamoramos, jugamos, reímos, sufrimos tal vez, pero hoy, lo que sea por caminar a tu lado. Aquel, mi corazón que pensaba tan marchito toma hoy nuevamente bocanadas de vida para no caer otra vez. Pero vive, se aferra, se mueve violento, tal vez con el viento en contra, pero pensé que no volvería a vivir tanto. Pudiera después quejarse, pero no debe olvidar que antes, hace no mucho cuando apenas te conocía estaba más vivo que nunca. Le brillaban los ojos, te seguía fijamente a cada palpitación, me mordía por no acercarme. Y ahora, sí, ha sido la prueba más difícil y tortuosa que haya vivido, tanto que a veces imagino que sangro sin siquiera verme físicamente herido. ¿será porque me siento tan herido? No lo sé. Tengo un corazón lleno de matices que cada día atravieso como un singular viaje de ida solamente, aquel que tienes que disfrutar porque no habrá un regreso para volverlo a apreciar. Tanto duele a veces que me cuesta trabajo respirar, como si el resto de mi también capitulara esta odisea. ¡No! 

Necedad, fe, amor, lo que sea, los hubieran si existen, siempre lo he dicho, pero contigo no los habrá, solo contigo hay o no. Y aquí estamos solos frente a todo, y pienso que la pelea es levemente pareja, inclusive siento que a veces tomamos mucha ventaja por estar los 2 hacia un mismo frente. Siempre que así sea, nada puede salir mal. Pero esto es ya de extremos, y de muerte al final es la pelea. La única forma de vivir es contigo al final, y la única forma de morir es sin ti. Simple, y sin embargo tan complejo como tu y yo lo podemos ser, somos más que algún concepto, más que cualquier cosa. 

Se acerca el fin de año, la época que más cariño le tengo, no se por que, pero me llena de melancolía y una tenue pero especial alegría, sale una vez al año y contigo quisiera compartirla. No se si nos alcance el resto del os días de esto que se acaba, pero se que sabrás qué pienso en ti aún después de que los días traigan más frío el año que viene. Y tal vez sea loco, pero quien no. Quisiera que leyeras ahora mis letras que salen de mi centro y llores. Sí, llora porque aquí sigo, porque por ti me quedo. El habitante dolido aún sigue en pie de lucha y como en extremos, o vive de lleno o muere en el intento. Si alguna vez viera esos ojos a punto de romper en llanto quisiera que fuera de felicidad. Solo así podría compartir las mismas lagrimas contigo. 

Alguna vez coincidimos y no las extraño, pero se que me tocaron, me dejaron saber que se siente finalmente tener esos semblantes encontrados. Llorar de felicidad. Tan intenso que solamente 2 personas podrían compartir. Hoy más maduro, más necio, tal vez más cansado pero al final yo se que llorando feliz no sería llorar, sería explotarnos como nadie entendería. ver a todos lados y solo vernos a nosotros, quedar ciegos como inmersos en un sueño eterno. Y quien no vive sino para soñar, ¿por qué vivir entonces sino para lograr los sueños? Y por ahora mi único sueño a lograr eres tú. Carmen Jones, te digo desde mi corazón que aquí estoy y aquí me quedo, le pese a quien le pese, a final de cuentas, es lo que queremos, estar juntos, y yo quiero algo más, quiero ser extraordinario, quiero contigo también quedarme. Y sí, soy necio, pero la verdad esta de nuestro lado y la necedad se diluye cuando la verdad habla, nunca falla, nunca se vence. La verdad es certera y justa para quienes justos son. Y así lo hemos sido para con nosotros mismos. No puede fallar.

Entonces que me presenten más dolores, más sufrimientos pero que sea como sea, creas en nosotros. Amo tus virtudes pero más amo tus defectos porque nadie mas los conoce así como yo. Y se que aunque laceran están ahí contigo. Podíamos haber evitado muchas cosas, pero ¿Cómo salir después de esto sin haberlas pasado? Se ve más oscuro a cada paso y con cada uno de ellos me siento más seguro. Que se presente lo que sea, al final, serán 4 pisadas en la arena y no solo un par las que se vean. Sí, díganme loco, necio, tonto, mentiroso o cínico. Ponganme adjetivos, enojense, cada quien sabe que tanto quiere o no quiere. Cada quien sabe lo que siente por sabernos destinados. Se lo que soy y se lo que quiero y más aún, se que me he esforzado por obtenerlo y nunca de mala fe. Ahora, que pelen en nuestra contra. Pero TÚ cree en mi, cree en nosotros. Por que esa es la recompensa a todo lo que siento por ti, el poder luchar día a día porque tus ojos brillen cada vez más, por mostrarte lo que es la felicidad y nunca te vayas de ella. Por hacer ver que la vida es hoy y que algo que te haga feliz lo tienes que arrancar por encima de aquellos que no les parezca. Hoy cree en nosotros porque nosotros al final quedamos y nadie mas. Carmen no nos podemos fallar....


El Habitante Consecuente