Creo I

Tengo entendida la certeza de mis letras,

la verdad de mis dominios,

las consecuencias de mis extremos.

Creo en todo lo que veo,

lo que siento y lo que soy por defecto.

Pero el oficio de una vida

que practico en todas mis letras

es conocerme totalmente.

Y el último respiro dará respuesta

a la incógnita que persiste constantemente.

Más que creer en mi mismo,

creo en mi corazón aunque ciego 

y muy inteligente, también es nada coherente.

Como todos, como nadie.

He de sentir aún así por lo que me define.

Más que lo que a tus pies me rinde,

me cuesta negarlo porque creo en ti.

No se como, que, ni donde.

Pero das brillo lúgubre a mis latidos.

Me siento tranquilo mientras desesperan mis sentidos.

Y así has regresado, pero, nunca te has ido

Solo encallaste en la esquina de mis recuerdos

te escondiste y callada, desde entonce, has vivido

Hoy que me has despertado, te veo,
y aún así quedo sorprendido.

Aquel día que te escondiste y me rompiste el alma

me costó sangre de abstinencia el olvidarte.

Tanto que los ojos me había quitado y

estaba a oscuras buscando el camino.

Y lo encontré aunque herido ya me había encontrado.

Respiraba sin sentir el aire,

me golpeaba el destino, pero no dolía.

La sangre circulaba pero muerto ya estaba.

Tan solo con una parte del corazón

vivir ya no podía, pero cuenta no me daba.

Y así cuando te vi, vivo me sentía.

Ya podía ver los golpes del destino

y terror aun me da volver a vivirlo.

Sentirte, tratar de entenderte, nuevamente amarte

¿amarte? aún me da terror siquiera definirlo.


Eres, pues, la más grande incógnita
que no puedo siquiera empezar a responder.
¿Qué hago? ¿Cómo te vivo?
Creo en ti, en mi, pero después,
la vida una negativa siempre nos ha ofrecido.

Nuevamente has regresado, pero hay algo distinto.
Más dudas que antes, una enorme duda que aplasta.
Los mismos cuerpos unidos aunque por dentro no pensamos,
solo sentimos y te beso y distinto tus labios me han sabido
pues secos los míos han estado, secos habían permanecido.


Tengo 2 grandes preguntas en mi vida:
¿Quién soy? y tu. Una al morir podre haberla respondido.
La otra, la vivo y entre más te vivo, menos entiendo.
Por ahora creo en ti, y aunque muera por eso,
lo que pase sera destino.